LA MUJER DE MI AMIGO Y YO

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Todo empezó aquella noche en la que me encontraba en una discoteca, fue allí donde me encontré con la mujer de un amigo y al saludarnos cruzamos algunas palabras.

Me decía que solo había salido a distraerse un poco ya que estaba un poco afligida por que había tenido problemas con mi amigo y llevaban ya casi un mes separados, como me encontraba un poco ocupado decidí pedir su número para que luego acordamos salir a tomar algo y hablar de lo sucedido con mi amigo.

No les voy a negar que la mujer de mi amigo siempre me pareció una mujer muy bella y atractiva, compagine muy bien con ella, me volvía loco pensar que tal vez tenia la oportunidad de tener algo con ella, aunque por otro lado dudaba un poco que esto pasara.

Después de ese encuentro estuvimos hablando un par de veces por teléfono pero no me anime a invitarla a salir por que me daba cierta cosa por mi amigo, hasta que al fin después de un par de semanas le hable nuevamente y recibí la mala noticia de que se había reconciliado con mi amigo y estaban viviendo juntos nuevamente.

En ese momento me di a la pena de que ya no tenía ninguna posibilidad, que lo mejor era olvidarme de ello.

Luego de esto salía cada fin de semana con mi amigo, íbamos a tomar unos tragos en un bar o en ocasiones en su casa y siempre me cruzaba con ella, pero ya era diferente, su mirada era diferente, su manera en que me hablaba, era evidente nuestro coqueteo, pero al parecer solo lo notamos los dos.

Al ver estas señales quise arriesgarme y volví a escribirle y sin ningún reparo ella respondía mis mensajes, fue así como empezamos cada día hablar mas y mas.

Nuestras conversaciones eran muy normales, ella me contaba sobre su día, sobre los problemas que tenía con mi amigo, lo sola que se sentía a veces y yo solo le hacia un halago de vez en cuando.

Aún no había pasado nada entre los dos, nada más allá de mensajes y llamadas, así fue hasta que tuve ese sueño.

En mi sueño nos besamos intensamente y poco a poco la ropa se desprendía de nuestros cuerpos, simplemente en mi sueño dábamos rienda suelta al deseo que sentíamos los dos.

Al llegar ese fin de semana recibí una llamada de ella, donde me decía que mi amigo la había dejado sola, que se había ido a tomar y que estaba muy aburrida, a lo que le respondí que nos viéramos un rato y saliéramos a tomar algo, a lo que ella aceptó. 

Solo puedo decir que esa noche tal y como lo vi en mi sueño, decidimos dar rienda suelta a las ganas que teníamos el uno del otro.

Después de esa noche tan increíble, nos volvimos imparables, parecíamos como una pareja recién ennoviados, yo la consolaba, la consentía, simplemente me encantaba estar con ella, nos entendíamos muy bien.

Me encantaba hablar con ella, salir con ella, me encantaba hacerla reír y sobre todo me encantaban sus besos, estaba seguro que había nacido un gran sentimiento entre nosotros.

Debo decir que a pesar de estar viviendo un sueño con ella, el estar en esta posición no era fácil, había momentos en que no podía ver a la cara a mi amigo, me sentía incomodo y sentía que quizá el sospechaba y era difícil manejar ese sentimiento de culpa.


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Recuerdo una noche que llegué tarde a una cita que tenía con mi amigo, habíamos quedado en salir pero yo primero me fui con su esposa y cuando por fin llegué donde el, me hacia preguntas y yo no sabía cómo responder. Hasta que le dije que estaba saliendo con alguien y por eso había demorado, pero créanme realmente te sientes culpable y muy sucio.

Después de un tiempo de andar saliendo, estábamos tan enamorados que nos dejamos llevar tanto de la pasión, tuvimos el descaro de hacer el amor justo en el cuarto del lado donde se encontraba mi amigo durmiendo y en su propia casa, creo que eso fue lo más bajo que pude haber hecho.

Con el pasar del tiempo me sentí tan culpable y pensaba que en algún momento todo saldría a la luz y vaya que eso sí que sería catastrófico, realmente reflexione sobre todo lo que estaba pasando y no quería que las cosas terminar mal.

En mi reflexión pude ver con claridad lo que estaba pasando, ella solo quería compañía cuando su esposo la dejaba sola, cuando veía que él se iba con sus amigos a divertirse y la dejaba en segundo plano, ella solo necesitaba atención y un poco de cariño, sentir que le interesaba a alguien.

A parte de eso también tenía otros propósitos, al salir conmigo llenaba esos vacíos, pero al final estaba también empezando a utilizar nuestra relación para sacar información sobre su esposo, cada vez que nos veíamos era porque él salía y siempre el me contaba lo que hacía o para donde iba y esa información yo se la daba a ella. 

No solo engañaba a mi amigo acostándome con su esposa, también traicionaba su confianza dando información que no debía y solo por mi propia conveniencia.

Fui egoísta y un horrible ser humano, cegado por esa gran atracción y tentación que sentía por ella, pero al final solo decidí desaparecer de sus vidas sacando excusas para no volver a ver a ninguno de los dos, decía que estaba ocupado, que no podía, o inventaba cualquier pretexto.

Y así di fin a esta parte de mi vida, realmente no sé si sentí amor o no, lo que si se es que disfrutaba cada momento compartido con esa dulce tentación.


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